El Banco Mundial ofrece perspectivas sombrías para la economía global en medio de tasas de interés más altas

El Banco Mundial ha publicado un pronóstico aleccionador para la economía global, esperando una fuerte desaceleración en 2023.

Factores como las altas tasas de interés, el impacto continuo de la invasión rusa de Ucrania. Y también los efectos persistentes de la pandemia de COVID-19 son factores clave que contribuyen a las difíciles condiciones económicas. El banco proyecta un crecimiento global de solo 2.1% este año, frente al crecimiento de 3.1% registrado en 2022.

Según Indermit Gill, El Banco Mundial economista jefe, los últimos hallazgos presentan una perspectiva sombría, con una continuación de la desaceleración sincronizada del año pasado.

Para fines de 2023, se espera que alrededor de un tercio de los países en desarrollo no alcancen sus niveles de ingresos per cápita de 2019. Esto destaca el potencial de disparidades de ingresos y desafíos económicos en estas regiones.

Aunque la El Banco Mundial El informe Global Economic Prospects presenta una perspectiva más optimista en comparación con su pronóstico anterior en enero. El crecimiento proyectado del 2.1% todavía indica importantes vientos en contra económicos.

A pesar de los aumentos agresivos de las tasas de interés por parte de los principales bancos centrales para combatir la inflación, la economía mundial ha mostrado resistencia. El banco prevé una aceleración gradual hasta un crecimiento del 2.4 % en 2024.

Perspectivas económicas sombrías del Banco Mundial

Estados Unidos ha desafiado las expectativas con sólidas ganancias de empleo, a pesar de los aumentos de tasas de la Reserva Federal. El Banco Mundial mejoró su pronóstico de crecimiento de EE. UU. para 2023 a 1.1%, lo que refleja un desempeño mejor al esperado.

Se espera que la eurozona experimente un ligero crecimiento del 0.4% este año, una mejora con respecto a las proyecciones anteriores.

La perspectiva de China ha mejorado, con una previsión de crecimiento del 5.6 % en 2023. Mientras que se espera que Japón e India experimenten una desaceleración de las tasas de crecimiento.

El Banco Mundial anticipa una desaceleración significativa en el comercio mundial este año. Y prevé un descenso notable de los precios de la energía y las materias primas.

Estas proyecciones reflejan la compleja dinámica económica influenciada por la guerra de Ucrania, la reducción de la demanda de calefacción debido a un invierno templado en Europa y los cambios en la oferta y la demanda mundial.

El Banco Mundial Las últimas perspectivas económicas revelan un camino desafiante para la economía global debido a factores como tasas de interés más altas, conflictos geopolíticos y la pandemia en curso. A pesar de las ligeras mejoras en las previsiones de crecimiento, las proyecciones generales indican una fuerte desaceleración.

Los países en desarrollo enfrentan el riesgo de disparidades de ingresos, mientras que se espera que el comercio mundial se desacelere y que los precios de la energía y las materias primas bajen.

El panorama económico sigue siendo incierto, lo que destaca la necesidad de un seguimiento continuo y medidas proactivas para apoyar la recuperación sostenible.