El portavoz del gobierno, Eylon Levy, suspendido tras un tuit diplomático
El portavoz del gobierno israelí, Eylon Levy, se ha encontrado en problemas después de entablar una disputa en Twitter con un diplomático extranjero. Levy, que actúa como la cara internacional del gobierno israelí, fue suspendido por la Oficina del Primer Ministro el martes por su respuesta a un tuit del secretario de Asuntos Exteriores británico, David Cameron.
Cameron había tuiteado que le dijo al ministro sin cartera Benny Gantz que Israel debe aumentar la ayuda humanitaria a Gaza. Eylon Levy respondió afirmando que era “fácticamente incorrecto” que los niveles de ayuda no hubieran aumentado. Y proporcionó estadísticas sobre los recientes camiones cargados de suministros que ingresaron al enclave costero. Según se informa, el Ministerio de Asuntos Exteriores británico se mostró en desacuerdo con la refutación pública de Levy a su máximo diplomático.
Levy no es ajeno a la controversia
Esta no es la primera vez que el estilo franco de Eylon Levy genera controversia. Las fuentes indican a Sara Netanyahu, esposa del primer ministro Benjamín Netanyahu. Anteriormente había intentado que Levy fuera removido por tuits que apoyaban las protestas judiciales antes de la reciente guerra entre Israel y Hamas. Como rostro internacional del gobierno israelí, los tuits de Levy son seguidos de cerca tanto en casa como en el extranjero. Sólo el tiempo dirá si esta suspensión frenará su voluntad de dialogar directamente incluso con funcionarios extranjeros de alto nivel en Twitter.
La suspensión de Eylon Levy llega en un momento delicado en las relaciones diplomáticas de Israel. Gestionar la percepción extranjera de sus políticas en Gaza y Cisjordania será crucial mientras se negocian la reconstrucción y un alto el fuego. Si bien la voluntad de Levy de contraatacar tiene sus partidarios, sus superiores parecen sentir que la discreción es el mejor camino a la hora de interactuar con los líderes mundiales en las redes sociales. La duración de su suspensión puede depender de si la Oficina del Primer Ministro considera que su mensaje ha sido recibido.
