Por qué los casos de sífilis están aumentando a un ritmo alarmante en Canadá
El creciente número de casos de sífilis en Canadá se ha convertido en un grave problema de salud pública, con tasas de infección que han aumentado más del 109% desde 2018. Los funcionarios de salud han estado luchando por contener la propagación de esta enfermedad de transmisión sexual, que puede tener consecuencias devastadoras para la salud si no se trata. .
Según las últimas estadísticas de Health Canada, solo en 14,000 se notificaron casi 2022 casos de sífilis. Lo que representa un aumento significativo con respecto a años anteriores. Si bien los hombres que tienen relaciones sexuales con hombres históricamente han estado en mayor riesgo, las tasas también han aumentado dramáticamente entre las mujeres heterosexuales en los últimos tiempos. Esta alarmante tendencia amenaza con revertir años de progreso en la reducción de las infecciones de transmisión sexual en el país.
¿Qué está impulsando el aumento?
Se cree que varios factores están impulsando el aumento de los casos de sífilis. El uso generalizado de medicamentos para la prevención del VIH, como la PrEP, ha provocado una disminución en el uso de condones en algunas poblaciones. Al mismo tiempo, es probable que también hayan influido el acceso más fácil a las citas en línea y el consumo de sustancias durante las relaciones sexuales. Además, la falta de acceso a la atención sanitaria y a los exámenes de detección en los grupos desatendidos dificulta la identificación temprana de las infecciones. Dado que los casos de sífilis se propagan rápidamente en diversos grupos demográficos, se necesitan urgentemente nuevas estrategias para frenar la transmisión.
Los funcionarios de salud califican la situación como una crisis de salud pública. Además de ampliar los servicios de detección y tratamiento, promover prácticas sexuales más seguras a través de campañas de educación y concientización será clave para controlar el brote. Si no se controla, el aumento de los casos de sífilis podría terminar revirtiendo el reloj de décadas de progreso en el bienestar sexual. Con un esfuerzo concertado, los expertos en salud pública esperan volver a reducir la curva de infección.